En primer lugar, agradecer a la Agrupación "Santa María Magdalena de Arahal", el contestar a nuestras preguntas. Aquí, os dejamos, la entrevista al completo.
1. Comentadnos vuestra historia resumidamente.
Nuestra formación musical tiene sus inicios en 1963, pero no es hasta 1964 cuando tiene su primera actuación.
Las raíces hay que buscarlas en la Organización Juvenil Española (OJE), al principio como una banda de Cornetas y Tambores (1963) y luego evolucionando e innovando un nuevo concepto: el de Agrupación Musical (procedente de acuñar el nombre de la Agrupación Logística conocida como el antiguo regimiento de Soria 9 y unirle el concepto musical). Esta nueva terminología fue creada por su Director Don Manuel Rodríguez Ruiz.
2. ¿Cuáles son los pasos en los que actualmente estáis tocando?
Domingo de Ramos: tras el Cristo de la Buena Muerte de la Hiniesta.
Martes Santo: tras el Nazareno de Lucena.
Miércoles Santo: Tras el Señor de la Oración en el Huerto del Puerto de Santa María.
Jueves Santo: Tras el Señor de Arahal en la Hermandad de la Misericordia de Arahal.
Viernes Santo (mañana): Tras el Nazareno de Paradas.
Viernes Santo (tarde): Tras el Cristo de la Esperanza, de la Hermandad de la Esperanza de Arahal.
3. ¿Queréis volver de nuevo a Sevilla?
No es una cuestión simple, ni se trata de querer o no querer, es que te salgan oportunidades y puedas aceptarlas, en los últimos años nos han ofrecido varias propuestas pero por diferentes causas no se han podido concretar. Por no hablar de la crisis, que está afectando a todo y en la actualidad el mundo de las bandas está bastante complicado, ya cualquier banda toca por un simple bocadillo y no se valora el trabajo y la constancia que tiene pasar casi 365 al año ensayando, no pretendemos decir que haya que cobrar barbaridades, pero sí que se valore el trabajo, el esfuerzo y la de cosas que hay que dejar a un lado por ensayar, para empezar la familia de cada uno... y durante esa semana tienes que dejar de trabajar o pedir vacaciones, y si dejas de trabajar el sueldo no lo puedes llevar a tu casa…
4. ¿Cómo os sentís cada Domingo de Ramos, al llenar San Julián y Sevilla, con vuestros sones?
Llegar a San Julián es llegar a nuestra casa, no lo decimos sólo porque seamos Hermanos Honorarios de la Hermandad, sino porque sentimos San Julián como una parte nuestra. Llevamos acompañando a nuestro Cristo de la Buena Muerte desde 1977, este año se cumplieron 35 años, pese al día tan aciago que nos hizo, allí estuvimos esperando con ilusión un nuevo Domingo de Ramos, aunque estamos seguros que el siguiente será espléndido, un magnífico Domingo de Ramos con Sol radiante y lleno de Azul y Plata...Hablar de cómo nos sentimos en la Hiniesta es hablar de una comunión perfecta, es nuestro referente para todo y la que nos ha mantenido siempre y a la que siempre guardaremos fidelidad, respeto y admiración, gracias a ella nuestros sones siguen paseándose por Sevilla.
5. Los momentos que más sentís con añoranza, o con un gran sentimiento, el Domingo de Ramos junto a la Hiniesta.
El sentimiento más grande es cuando nos bajamos del autobús en la Puerta de Córdoba y nos encaminamos a San Julián, donde es visita obligada el rezar ante nuestros titulares, frente a ellos tratamos de relajar y tranquilizar los nervios que siempre acompañan en cada salida.Después la salida con el Himno e inmediatamente después Cristo de San Julián, siempre es algo que nos emociona ver esa salida tan complicada por la ojiva acompañado con nuestros sones.
Y bueno, aunque sea muy predecible la Campana es algo especial, siempre con marchas escogidas primorosamente por nuestro Director D. Manuel Rodríguez Ruiz intentamos que el Cristo de la Buena Muerte se luzca lo mejor posible ante Sevilla. Otro momento indiscutible es la Cuesta del Bacalao, es el balcón de Sevilla, donde la cofradía puede brillar como pocas, eso sí sin demasiado retraso que luego viene el palio detrás. Hace dos años nos otorgaron a la Hermandad y a la Agrupación un premio por la mejor subida de ese año, si no mal recordamos hay una placa cerámica en la Casa Hermandad que lo certifica.
Y para finalizar la entrada, aunque llevemos más de 10 horas tocando esa satisfacción del deber cumplido con nuestro Cristo y nuestra Hermandad no hay quien nos la quite, con sólo fijarse un poco la Agrupación suena igual que cuando comenzó a tocar a eso de poco más de las 3 de la tarde, ahí no se nota el cansancio sólo la emoción y eso te da fuerzas de sobra para aguantarlo todo.
